Imposible. Ese fue mi primer pensamiento cuando vi el listado de clase. En uno de mis nueve cursos de inglés, 13 de mis 27 estudiantes tenían IEP (Programas de Educación Individualizada). Además, una tercera parte de mi alumnado había suspendido el año anterior. Temía, incluso, encontrármelos el primer día de colegio. Pero, después, sucedió algo maravilloso: el director me asignó una co-teacher (co-docente), es decir, una experta en educación especial, para ayudarme cada día durante las clases. Estaba emocionada.
Colaborar con Sandie, mi co-teacher, era un tesoro, pero nuestra relación no fue para nada perfecta, especialmente al principio. A menudo, luchábamos por encontrar tiempo de planificación. Algunas veces no estábamos de acuerdo sobre cuál era la mejor ayuda para un alumno o una alumna en particular. Sin embargo, alimentamos la relación y encontramos a tiempo nuestro ritmo de trabajo para poder ayudar a nuestro alumnado.
En los años en que co-enseñé con Sandie y con otros profesores y otras profesoras, ayudé y mantuve contacto con diferentes docentes sobre el éxito o no en los equipos. El co-teaching, cuando se realiza bien, ofrece beneficios tanto para el alumnado como para el profesorado. Por el contrario, cuando no se realiza bien puede ser confuso o frustrante para aquellos que están involucrados.
¿QUÉ ES EL CO-TEACHING?
En una relación de co-teaching, también conocida como arreglo “push-in” arrangement, un docente de educación general puede asociarse con un especialista que podría estar certificado en la enseñanza de English Language Learners (ELLs) a estudiantes con dificultades de aprendizaje u alguna otra necesidad especial. El trabajo en equipo de co-teaching la mayoría del tiempo, el alumnado con necesidades especiales no es sacado fuera del aula para recibir una atención personalizada en otro lugar. Por ejemplo:
- Un profesor de estudios sociales en un middle school podría tener asignado un profesor o una profesora ELL con él durante uno de los períodos de clase, porque cinco estudiantes recién llegados a EE. UU. sólo hablan árabe fluidamente.
- Una profesora en un high school (Educación Secundaria) podría tener una o dos secciones de biología en las que muchos y muchas estudiantes sean remitidos y remitidas a programas de IEPs (Programas de Educación Individualizada).
- El co-teacher especializado en discapacidades para la lectura puede co-enseñar en estas clases.
- Un profesor de 4º grado (de 9 a 10 años) podría tener dos estudiantes con plan 504 (planes formales que las escuelas desarrollan para evitar la discriminación y proteger los derechos de niños y niñas con discapacidades en la escuela) y otros tres que tienen discapacidades específicas en el aprendizaje en su clase. Ella trabaja junto a un profesor de educación especial durante las lecciones en las cuatro áreas académicas principales.
Para más información, puedes descargar esta pequeña historia del co-teaching.
ESTRUCTURAS DEL CO-TEACHING
Profesores y profesoras de educación general que trabajan con especialistas en un modelo de este tipo, a menudo utilizan con una de las siguientes estructuras de Friend y Cook (1996):
- Uno enseña, otro observa. Un profesor entrega instrucciones mientras el otro observa el aprendizaje de los estudiantes. Normalmente, el observador recolecta datos del conocimiento de los estudiantes y así el equipo de co-teaching puede mejorar las instrucciones de cara al futuro. Algunas veces, estudiantes específicos son observados más de cerca y, de esta manera, los profesores pueden plantear nuevas estrategias para aplicar con ellos.
- Uno enseña, otro asiste. Un profesor facilita instrucciones mientras el otro se mueve por el aula, asistiendo a los estudiantes que tienen problemas. Esta ayuda se limita exclusivamente al alumnado con necesidades especiales, sino para todo aquel que la necesita.
- Enseñanza en paralelo. La clase se divide en dos grupos y los profesores facilitan el mismo material a ambos grupos. Los profesores plantean a los dos grupos deliberadamente la misma tarea para maximizar el éxito de todos los estudiantes; esta forma de trabajar no es simplemente un pull-out o una intervención de grupo situada en el mismo aula.
- Estación (o zona) de enseñanza. Ambos profesores se involucran activamente tanto en las explicaciones como en la división del alumnado en grupos, rotando estos de una estación (o zona) de trabajo a la siguiente. Podrían ser estaciones donde los estudiantes trabajan independientemente o con un asistente educativo además de las dos estaciones que los dos profesores facilitan.
- Enseñanza en equipo. Ambos profesores enseñan el contenido simultáneamente y en tándem, o en la forma de tag team (en equipo).
Es importante observar que ambos profesores mantienen el mismo estatus y la misma responsabilidad en todas y cada una de las cinco formas expuestas. En las relaciones de co-teaching que mejor funcionan, nunca un profesor se subordina al otro; ambos son profesionales acreditados, aunque cada uno podría tener su área específica de experiencia.
¿CÓMO SE HACEN LA MAYORÍA DE LAS COLABORACIONES DE CO TEACHING?
Investigadores y profesionales tienen multitud de consejos sobre cómo hacer funcionar el co-teaching de forma efectiva, además de otras personas que han estado «a la sombra» de los co-teachers, como es mi caso. A continuación, propongo una serie de consejos y recomendaciones.
RESPETO MUTUO
Se deben que compartir ideas abiertamente y abordar el trabajo con el alumnado de manera conjunta
El respeto mutuo es fundamental en una relación de co–teaching. Se deben que compartir ideas abiertamente y abordar el trabajo con el alumnado de manera conjunta. Como co-teacher y especialista ELL, Melissa Eddington afirma que «es bueno estar en desacuerdo con algunas ideas, pero no crear una discrepancia sobre la persona.»
Los docentes que en situaciones de co-teaching no trabajan bien, a menudo han informado que han experimentado sentimientos de falta de respeto. Un ejemplo es el de Amy*. Ella es especialista en ELL y está emparejada con una docente de estudios sociales en una middle school. Cuando ambas colaboran, Amy siente que su compañera no toma en serio las sugerencias que hace para las lecciones de clase completa: «Ella me respeta como una profesional» dice de su co-teacher, «pero pienso que, como no tengo experiencia en su contenido, no ve valiosa mi contribución.»
Otro caso es el de Susan*, licenciada en Enseñanza de las Ciencias y Dificultades en el Aprendizaje y que trabaja con dos docentes de Ciencias Físicas y un docente de Biología. Los docentes de Ciencias Físicas reciben sus ideas con entusiasmo, y abordan sus lecciones basándose en sus sugerencias. Ambos están viendo las mejoras de los resultados en las clases que Susan apoya. Sin embargo, el docente de Biología descarta muchas de las ideas de Susan, y la acusa de dumbing down, es decir, de simplificar intelectualmente el contenido. Susan siente despreciada y le resulta incluso difícil estar en la sala con este docente, pues se posiciona constantemente como experto y la pone a ella en un papel de subordinada.
Conclusión: Las palabras y los gestos dicen mucho. Por ello, trata de mostrar respeto por tu compañero o compañera en todo lo que hagas.
DEFINE CLARAMENTE ROLES Y RESPONSABILIDADES
Las funciones y responsabilidades claramente definidas evitan el sentimiento en uno de los dos de ver sobrepasadas sus responsabilidades
El co-teaching funciona mejor cuando la pareja está de acuerdo en quién hace qué, y cuándo lo hace. Las funciones y responsabilidades claramente definidas evitan el sentimiento en uno de los dos de ver sobrepasadas sus responsabilidades.
Natalie Marston (2002-2015), una docente de educación especial, recomienda a los co-teacher llegar a acuerdos en los horarios, procedimientos en clase, en el ambiente de trabajo, en las reglas para la elaboración y entrega de los trabajos de clase y de casa, las calificaciones o la comunicación escuela/casa.
Obviamente, este tipo de planificación requiere de un acuerdo en cuanto a los tiempos, preferiblemente antes del comienzo de las clases. Si no fuera posible antes del inicio del año escolar, el equipo de co-teachers debería dedicar unas horas extra a la planificación durante las primeras semanas, para asegurar un buen comienzo.
Esta situación la vivimos mi co-teacher Sandie y yo en «primera persona» y, durante algunas semanas, nos sentimos como jugando a Catch up und keep up, es decir, a recuperar el tiempo perdido. Sin embargo, algunos almuerzos juntas (y algunas horas felices en equipo) nos ayudaron a sincronizarnos.
SÉ FLEXIBLE
El co-teaching aúna perspectivas y aprendizajes de diferentes docentes. Esto, en ocasiones, supone tener que dejar de lado una determinada estrategia de aprendizaje por otra diferente.
La innovación educativa es difícil. Por ello, muchos docentes prefieren ser conservadores y realizar siempre las mismas actividades y estrategias. El co-teaching aúna perspectivas y aprendizajes de diferentes docentes. Esto, en ocasiones, supone tener que dejar de lado una determinada estrategia de aprendizaje por otra diferente.
Cuando Susan sugirió a sus compañeros de co-teaching en el área de Física un método de prueba tactile quiz similar a un cuestionario para revisar la tabla periódica, inicialmente se mostraron escépticos sobre la planificación y los materiales necesarios. En su opinión, creyeron más eficiente dar notas adicionales a su alumnado y, posteriormente, que los estudiantes por parejas se preguntasen los unos a los otros. Finalmente, decidieron poner en marcha la propuesta de Susan. A los estudiantes les encantó la actividad e, incluso, la mayor parte del alumnado con necesidades especiales aprobó el test dos días más tarde. Los tres docentes estaban entusiasmados y se comprometieron a usar la actividad en cursos posteriores.
PLANIFICA EN COMÚN
los equipos de co-teaching necesitan una amplia planificación del tiempo para trabajar de la mejor forma para cada uno
Una relación de co-teaching reúne a dos personas expertas en la materia y con una rica experiencia educativa. Los educadores especiales son habilidosos en individualizar el plan de estudios y las actividades en función de las necesidades de los niños y las niñas (Dettmer et al., 2005; Volonino & Zigmond, 2007). Los educadores generales, por otro lado, tienen a tener un amplio conocimiento en el curriculum, los estandares, y las metas deseadas para grupos grandes. De esta forma, cuando un educador general planea lecciones tiende a apuntar a los grupos (Dettmer et al., 2005). Ambas perspectivas son importantes, y los equipos de co-teaching necesitan una amplia planificación del tiempo para trabajar de la mejor forma para cada uno.
La falta de tiempo a la hora de planificar puede conducir al territorialismo. Sin tiempo para planificar correctamente, un profesor de educación general se volcará principalmente en sus temas y un especialista sobreprotegerá a sus estudiantes.
Emma*, una profesora de educación especial en un High School, se asoció con dos profesores de geometría. A menudo, una de las docentes le proponía trasladar a los cinco o seis estudiantes con discapacidades específicas a otra aula para trabajar sola con ellos: «Tú preocúpate de tus niños y yo me preocuparé de la geometría» le dijo en varias ocasiones. En la actualidad, el director ha facilitado una hora adicional de planificación a Emma y a los docentes. Además, Emma y los docentes de geometría cuentan también con el apoyo de un asistente del director que supervisa el departamento de matemáticas. De esta forma, ambos profesores cuentan con otro experto para la parte de contenidos, para debatir los asuntos relacionados con su área.
¿Cuanto tiempo es el ideal? Un estudio encontró que los co-teachers desean, de media, de 15 minutos a 1 hora al día para planificar (Dieker & Murawski, 2003). Esta cifra se corresponde con mi experiencia de co-teaching, y también con lo hablado con otros profesores y otras profesoras con las que he hablado sobre el tema.
NO TE TOMES DEMASIADO EN SERIO A TÍ MISMO
Como en la mayoría de las situaciones de la vida, un poco de humor siempre viene bien
La innovación requiere fracasos. En ocasiones, los profesores y las profesoras sienten que han fracasado de alguna manera durante el proceso de enseñanza-aprendizaje. En realidad, nosotras y nosotros somos, a menudo, nuestros peores críticos. Corrigiendo algo después de la lección, o al día siguiente, no significa que fracasaste antes. Eso significa solo que has aprendido algo de lo experimentado. Y precisamente es esto el tipo de aprendizaje continuo que queremos como modelo para nuestros alumnos.
Como en la mayoría de las situaciones de la vida, un poco de humor siempre viene bien. Recomiendo reírse con tu co-teacher y posibilitar a nuestros estudiantes vernos reír conjuntamente y con ellos cuando algo es inesperado, absurdo o tonto, o solo porque no va por el camino planeado. En palabras de Jennifer Wolf, que trabaja como co-teacher con Melissa Eddington, «[…] tómate el trabajo seriamente, pero no te tomes a ti mismo demasiado en serio.»
Eddington añade, «[…] ¡Reíros el uno con el otro! Nuestro trabajo es duro y si tú no te estás riendo y estás haciendo mas ligeras algunas cosas, entonces no será un buen lugar para estar.»
COMUNICARSE, COMUNICARSE, COMUNICARSE
los co-teachers también deben comunicarse de manera menos formal.
El tiempo de planificación es una constante comunicación entre un docente y el otro. Además de planificar qué estándares van a cubrir, cómo se impartirá la materia o cómo serán evaluados los alumnos y las alumnas, los co-teachers también deben comunicarse de manera menos formal.
Los equipos de co-teaching tienen diferentes métodos para crear y mantener esa comunicación:
- Eddington and Wolf usan la aplicación Voxer tanto en el colegio como en sus dispositivos de casa, para enviarse mensajes y comunicarse. Voxer funciona como un walkie-talkie y permite una conversación bidireccional en tiempo real cuando dos personas no están cerca físicamente. Melissa dice «[…] estamos constantemente en comunicación, hablando sobre determinados estudiantes, mirando evaluaciones para ver qué áreas son insuficientes, sobre diferentes materiales que queremos llevar a clase, sobre aquellas cosas que no queremos hacer, etc. […].»
- Otros equipos han funcionado con el uso de texto o con el correo electrónico. Voxer y el correo electrónico pueden funcionar muy bien, especialmente si uno de los profesores tiene una información urgente o una pregunta sobre un estudiante en particular.
- Hay equipos que usan Google Docs y otras app donde compartir documentación, la planificación, las lecciones, el propio feedback sobre cómo fueron las lecciones, etc. Los documentos colaborativos también pueden usarse para proporcionar información sobre determinados estudiantes.
En relación con el tema de la comunicación, Ariel Sacks (2014) nos aconseja chequear periódicamente junto con nuestros co-teachers lo que estamos haciendo. Ella recomienda plantear algunas preguntas a nuestro compañero o a nuestra compañera del tipo:
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¿Qué aspectos deberíamos de clarificar como, por ejemplo, cuándo tienen permitido los estudiantes ir al baño?
- ¿Estamos compartiendo bien el airtime o «tiempo de emisión»?
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¿Estamos dividiendo el curso de una forma equitativa?
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¿Podríamos utilizar mejor los diferentes formatos de enseñanza en el aula?
Finalmente, los co-teachers deberían hacer frente común cuando traten con los padres. Algunos profesores se lo toman muy en serio, llegando a crear canales de comunicación con las madres y los padres mediante correos electrónicos compartidos, con el objetivo de que la comunicación fluya. Esto puede ser o puede no ser práctico en tu situación pero, como mínimo, deberían redactarse informes para los padres en los que ambos profesores les comuniquen los progresos educativos de sus hijas e hijos.
Para más información sobre comunicación y colaboración con tu co-teacher visita Communicating and Collaborating in Co-Taught Classrooms (Conderman et al., 2009).
SOLICITA APOYO ADMINISTRATIVO SI LO NECESITAS
Si ya practicas el co-teaching pero no está funcionando bien, y has intentado solucionar sin éxito los problemas con tu compañero o compañera, recurre a un administrador de confianza para que te aconseje
A veces, a los docentes les han creado su horario y tareas de co-teaching por administradores sin tener mucho preaviso Esto es lo que nos sucedió a Sandie y a mí. A pesar de no contar con una planificación de tiempo estipulada, tanto ella como yo logramos encontrar algunos ratos durante nuestra jornada laboral para planificar y revisar el trabajo. Si tú y tu compañero o compañera no teneís un espacio temporal común de planificación cuando colaboras frecuentemente, pregunta por ello y ves a tu director con un par de propuestas sobre como puede funcionar sin demasiada molestia para el resto de programación.
En ocasiones, los co-teachers podrían no entender totalmente por qué están siendo preguntados para hacer equipo. Si este es el caso, pregunta para solicitar un encuentro con el director y con otros responsables de las tareas. Pregúntales porque ellos pensaron que encajaría bien y que es lo que esperan lograr con los estudiantes.
Si ya practicas el co-teaching pero no está funcionando bien, y has intentado solucionar sin éxito los problemas con tu compañero o compañera, recurre a un administrador de confianza para que te aconseje. Si tú o tu co-teacher no ha sido observado por la persona correspondiente recientemente, pide al administrador que asista durante un rato a la impartición de la lección para que os diga a ambos qué es lo que no está marchando bien. Conviene que asistáis ambos, pues el punto de vista puede ser diferente para tu compañero o compañera que para ti. Cuando un observador ofrece datos y feedback para ambos, eso podría hacer sentir diferente a tu compañero o compañera que cuando las compartes desde tu propia perspectiva. (Este formulario de observación puede ayudar)
Es importante no ir a otros docentes con tus preocupaciones. Respeta la relación que tienes con tu compañero o compañera de profesión y no hagas nada que pueda deteriorarla, pues es importante no transmitir vuestros problemas al alumnado, y sé consecuente con tus actos, tono y lenguaje no verbal. Los estudiantes son bastante perceptivos y pueden detectar los problemas fácilmente y encasillaros en «policía bueno / policía malo». No permitas que el otro profesor o los propios estudiantes se vuelvan en tu contra Si tus compañeros o estudiantes te dan una evidencia de que saben de la ineficiencia del co-teaching, dirígete directamente al administrador de confianza para que haya un respaldo.
* Los nombres han sido cambiados para respetar su intimidad.
Referencias
Conderman, G., Johnston-Rodriguez, S., & Hartman, P. (2009). Communicating and collaborating in co-taught classrooms. Teaching Exceptional Children Plus,5(5). Retrieved January 26, 2017, from http://files.eric.ed.gov/fulltext/EJ967751.pdf
Dettmer, P., Thurston, L., Knackendoffel, A., & Dyck, N. (2009). Collaboration, consultation, and teamwork (6th ed.). Columbus, OH: Pearson.
Dieker, Lisa A., Murawski, W. M. (2003). “Co-teaching at the Secondary Level: Unique Issues, Current Trends, and Suggestions for Success.” The High School Journal, 86(4). Retrieved January 26, 2017, from http://search.proquest.com/docview/220220652/13494E2D48D1DB506F0/8
Friend, M. & Cook, L. (1996). Interactions: Collaboration skills for school professionals. White Plains, NY: Longman.
Marston, N. (2002-2015). Six steps to successful co-teaching: Helping special and regular education teachers work together. National Education Association. Retrieved January 26, 2017 from http://www.nea.org/tools/6-steps-to-successful-co-teaching.html
Sacks, A. (2014, October 15). Blog post. Eight tips for making the most of co-teaching. Retrieved January 26, 2017, from http://www.edweek.org/tm/articles/2014/10/15/ctq_sacks_coteaching.html
Volonino, V. & Zigmond, N. (2007). Promoting research-based practices through inclusion. Theory into Practice, 46(4), 291-300.
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